El Reino de Almuñecar-Gastroalmuñecar 2013

Nuestro mundo se encontraba inmerso en una oscura desidia, los nubarrones se cernían sobre nuestras cabezas amenazando lluvia de malestares, crecidos en innumerables batallas perdidas. Eran tiempos de penuria, tristeza y desolación.

Por doquier nos atenazaban malos augurios que hacían nuestros días estresantes, repetitivos, faltos de toda emoción. Todos los súbditos del reino estaban temerosos, habían perdido la esperanza y algunos, los más débiles habían sucumbido y abandonado la lucha para siempre.

Pero la fortuna nos deparaba una experiencia que nos salvaría de nuestra anodina realidad, hasta nosotros llegó un edicto de la Bella Helena, gran Dama de Almuñécar, en el cual nos invitaba a formar parte de una cohorte de mensajeros. Ella nos enseñaría su reino con todas sus maravillas, nos haría disfrutar de sus exquisitos manjares, sus hermosos paisajes y su acogedora gente y nosotros nos encargaríamos de difundir esa magnifica experiencia por el mundo.

El Ayuntamiento de Almuñécar junto al Patronato de Turismo de Almuñécar y La Herradura, José Muñoz de Heladerías Daniel y la D.O.P. Chirimoya denominación de origen fueron los artífices de esta maravillosa experiencia.


Partimos desde nuestros feudos, cargados de ilusión y deseando llegar al vergel prometido, un paraíso con olor a sal, aguas de cálido tacto, dulces sabores tropicales y gentes desprendidas y amigables. La propia Helena nos recibió en el centro de la Villa, en una bonita plaza en la que se alza su hermoso Ayuntamiento.


Su consorte nos guió con amabilidad hasta nuestro hotel. La ciudad de Almuñécar tiene un sin fin de magníficos establecimientos hoteleros repartidos por la costa y el centro, deseosos de recibiros a todos. El lugar que nos habían asignado era El Palacete del Corregidor, un precioso alojamiento municipal, cálido y con mucho encanto.

Tras quitarnos el polvo del camino nos dirigimos al banquete de bienvenida, en las estancias del Reina Sofía uno de los mejores restaurantes que se pueden encontrar en la ciudad que son muchos y muy variados; Barecitos de tapas populares y sabrosas, preciosos chiringuitos a la orilla del mar, cafeterías acogedoras y heladerías con tonalidades irresistibles.


El restaurante Reina Sofía está situado en el paseo de la villa frente al mar. Miguel F. Castilla, recibió al grupo de embajadores venidos de distintos puntos de la geografía española e incluso de más allá de nuestras fronteras y nos agasajó con viandas exquisitas dignas de un Rey.

Hummus con pimentón y jamón

Tartar de Langostinos con mahonesa de aguacate

Bacalao confitado con ragú de habitas

Chuletillas de cordero segureño con cous-cous

Brownie con helado de vainilla tahití y sorbete de mango

Fotografía de Lola Homar

Disfrutamos del banquete acompañados de vinos del condado de Fontedei y recibimos a la luna frente al mar compartiendo las historias que cada uno traía de su tierra.

La mañana despertó prometiéndonos una jornada llena de experiencias únicas, como única, es esta tierra adorada por Fenicios, Romanos, Musulmanes y Cristianos los cuales se sintieron fascinados por el lugar y se quedaron a vivir formando parte de su historia.

Abandonamos el catre para dirigirnos a la oficina de turismo, en el Palacio de La Najarra. La ciudad estaba engalanada para recibirnos y sus jardines sirvieron para estrechar lazos. Una vez que todos presentamos nuestras credenciales, José Helaero, uno de nuestros anfitriones proclamó ante todos la ruta que seguiríamos durante el día...

Nuestra misión, nos llevaría a las afueras de la ciudad para conquistar lugares con tesoros exóticos y espirituosos. Y volveríamos a Sexi para descubrir una feria, que disfrutaríamos como premio a nuestra cruzada, junto a los lugareños. Pero antes debíamos recurrir a la magia para coger fuerzas...

El Parque del Majuelo, es un edén botánico con innumerables especies tropicales, originarias algunas de países lejanos, además el parque, alberga en su interior una fantástica fabrica de salazones que tenía una importante producción en la época romana.

Este oasis acogió el inicio de nuestra experiencia gastronómica, un opíparo desayuno organizado por heladerías Daniel, en el que degustamos la cazuela mohina, dulce de origen nazarí, con la mágica receta de una dama oriunda del lugar, la madre de José Muñoz. El jamón de Nevadensis dio el toque saladito y deliciosos manjares fueron traídos por algunos de los mensajeros; Lidia, Begoña, Reme y José. ¡Ah! mirad en la foto la piedra decorada, ¡preciosa! gracias a Luis y el artista D'ko por el bonito detalle. 

Una vez nos hubimos alimentado generosamente, tomamos un gran "carruaje" en el que nos trasladamos a las afueras de la ciudad, nuestro cicerón era José Manuel Fernández, concejal de comercio de la ciudad, que nos instruyó y nos abrió el camino hasta el Romeral donde sus mercaderes distribuían las exóticas frutas a todo el mundo. Chirimoyas, Mangos, Papayas, Piñas, Cerezas, Nísperos... deliciosas todas ellas. Sus amos nos invitaron a probarlas y refrescarnos con su sabrosa pulpa.

Seguimos camino hasta llegar a las Bodegas Calvente en el condado de Jete, donde como dicen sus escritos "Desde antiguo, las brisas y brumas del Mediterráneo, han subido por los pagos de Guindalera y Castillejos, refrescando las uvas en los viñedos, consiguiendo maduraciones muy lentas e intensas" Los Señores de Calvente nos contaron con verdadera pasión la creación de sus vinos, caldos espirituosos que pudimos comprobar son de una gran calidad y exquisitez. El blanco Calvente ha recorrido el mundo entero con un éxito increíble.

Azuzamos "los caballos" pues la feria mayor nos estaba esperando. De nuevo estábamos en el Majuelo. Rodeados de los vecinos de Almuñécar y en un lugar increíble ¡menudo festín! ¡No podíamos tener mejor premio!

Nos colocaron en un sitio privilegiado donde divisábamos toda la feria, compartimos viandas, caldos, dulces y relatos. La música nos acompañaba y tres de nuestros destacados blogueros Ana, Helena y Lidia se dirigieron al pueblo a través de las ondas y le agradecieron su calurosa acogida.

Foto de familia con los organizadores y con nuestras camisetas naranjas regalo de "Todo para tú cocina" ¡¡gracias!!

Fotografía de Helena del valle

Empezamos a recorrer los puestos de manjares traídos por 23 restauradores locales, todo era maravilloso, no sabías a donde acudir, que delicias escoger. Por pocos "maravedíes" podías componer una mesa variada, en la que todo era exquisito. Estos son algunos de los que estuvieron allí...

Aquí tenéis un pequeñito ejemplo de lo que podíais encontrar en la feria. ¡Ah! y falta el fuego, un fuego mágico y poderoso, un arroz al que no llego la foto y unas parrillas que eran para volverse loco, un banquete de Dioses.

Como coronación al festín José Helaero, nos preparo un delicioso cóctel de chirimoya combinada con Ron El Mondero que estaba de lujo! Luego visitamos las playas a bordo del trenecito, un viaje muy divertido en el que todos los vecinos saludaban a nuestro paso.

Estando en Almuñécar, me olvidé de todos los problemas habidos y por haber, me desapareció el estrés y olvidé todo atisbo de malestar. Como decía al inicio de la crónica, Almuñécar tiene un efecto envolvente que te transporta, te hace disfrutar del momento, del lugar y del ambiente. Puedes navegar o bucear en sus cálidas aguas, perderte en sus valles tropicales y bañarte en las cristalinas aguas de Río verde, recorrer sus bonitas calles por el Barrio antiguo de San Miguel y visitar los monumentos y rincones en los que se respira la cultura y la historia de todos aquellos que dieron lugar a el que hoy es un pueblo sin igual.


Durante el día podéis disfrutar del ajetreo de su maravilloso mercado, no dejéis de ir a los mercados de los lugares que visitáis son experiencias muy interesantes. En el de Almuñécar tenemos una mezcla de productos maravillosos que dan explicación a su rica gastronomía y sus puertas se engalanan con puestos de aromáticas flores. Puedes recorrer sus ajetreadas calles, disfrutar del sol en sus extensas playas y divertirte en sus parques y atracciones, que son ideales para los niños.

La vida cultural es increíble; cines, ferias, conciertos de música de todo tipo y Festivales; de Teatro, de Cortos de Cine, de Guitarra... y el Festival de Jazz uno de los más importantes de España. Y al llegar la noche... Almuñécar se transforma, la gente se lanza a disfrutar de sus bares, chiringuitos y una amplia gama de locales nocturnos, que hacen la delicia de los noctámbulos de todas las edades, ¡que nos lo digan a nosotros! que lo pasamos la mar de bien con Eloisa en el Pub Bambola.

En resumen... que no podéis dejar de venir a Almuñécar y probar su magnífica gastronomía. Os recibirán con los brazos abiertos y os aseguro que lo vivido aquí quedara para siempre en vuestra retina y vuestro corazón, os lo digo por experiencia. Ahora, vamos a la receta...

Me fui de Almuñécar el domingo por la mañana y no pude recoger la magnífica pulpa de Chirimoya que nos tenían preparada, por lo tanto, a la hora de la receta me decidí a utilizar otros productos, también exquisitos, que se cultivan y distribuyen en Almuñécar. He realizado un postre tropical compuesto por bizcocho de piña, requesón y compota de mango perfumada con Ron Mondero, cortesía de la marca de Salobreña, y lo he acompañado con un refrescante helado de aguacate.


Compota de mango

Pelaremos un mango hermoso y lo cortaremos en cuadraditos, eliminando la parte dura. En un cazo pondremos un vaso de agua (250 ml) y una copita de Ron Mondero, añadimos 35 g de azúcar, la cáscara de un limón y una ramita de canela. Cuando empiece a hervir lo dejamos unos 5 minutos, seguidamente ponemos el mango troceado y lo dejamos hirviendo durante 10 minutos a fuego suave. Retiramos y dejamos enfriar.

Bizcocho de piña

Un yogur de limón nos servirá de medida, lo vaciamos en un cuenco y reservamos. Ponemos en un bol 4 huevos y 2 medidas del yogur de azúcar, batimos hasta que doblen su volumen. Añadimos entonces el yogur, 1 medida de aceite de oliva suave y la ralladura de un limón, batimos hasta mezclar bien. Incorporamos 3 medidas de harina tamizadas junto con un sobre de levadura y batimos hasta que la mezcla este homogénea. Añadimos a la mezcla 4 rodajas de piña cortada en trocitos. En un molde engrasado con spray o mantequilla y harina, pondremos la mezcla e introducimos a horno precalentado a 180º durante unos 45 minutos, comprobar con un palillo que sale limpio.

Helado de aguacate

Pondremos 375 ml de nata bien fría en un bol y le añadimos 150 g de azúcar, batimos hasta que esté bien montada y reservamos. Pelamos y troceamos 2 aguacates y los trituramos junto a 175 g de queso blanco cremoso. Ya triturado, le añadiremos 125 ml de zumo de limón y lo mezclamos todo bien. Después, tomaremos la nata y la vamos añadiendo con movimientos envolventes en tandas. Lo metemos en el congelador y lo sacamos pasada 1 hora, batimos bien con varillas para romper los cristales de hielo y lo volvemos a meter en el congelador. Repetiremos esta operación cada 30 o 40 minutos hasta conseguir una consistencia de helado suave.

Cortaremos con un molde de aro el bizcocho y lo mojamos un poquito con el caldo de la compota, colocamos sobre el bizcocho el requesón (o queso fresco) cortado con el mismo molde y encima ponemos la compota de mango. Adornamos con unas hojitas de menta, colocamos las bolas de helado y listo!! Espero que os guste!!


 Btrix


Con esta entrada participo en el primer concurso de blogs gastronómicos organizado por el Ayuntamiento de Almuñécar.