Estaba preparando una crema de mantequilla para unos cupcakes y confundí el azúcar glas con el azúcar blanco que tenia preparada en otro plato, al mezclarlo con la mantequilla y el resto de los ingredientes la textura no era la adecuada para la crema y pensé, esto me tiene que servir para otra preparación y me decidí, por hacer unas galletas de mantequilla.
Adapte los ingredientes que tenía ya integrados y añadí proporcionalmente hasta completar los de las galletas de mantequilla, luego le puse los huevos y la harina. La única diferencia eran las dos o tres cucharadas de leche pero la masa que salio fue perfecta y las galletas salieron buenísimas.